sábado, 31 de diciembre de 2011

UN HOMBRE DE CARACTER PODRÁ SER DERROTADO, PERO JAMÁS SERÁ DESTRUIDO

El buen Hemingway escribía duro-duro; porque era un hombre duro.


"Nosotros formamos parte de un equipo  en el que no se piden ni conceden favores" le dijo Hemingway a un colega. "Ningún escritor que valga algo es un escritor nacional o un escritor de Nueva Inglaterra o del Renacimiento o un escritor brasileño. Todo escritor que algo vale es simplemente un escritor. El nuestro es un equipo en el cual es difícil jugar... Y uno es capaz de hacerlo o no".










***A todos, pero a todos, se les desea un gran 2012; lleno de letras y cuanto sea necesario

domingo, 25 de diciembre de 2011

LLUVIA


I

La lluvia no da tregua
pero la noche permite otros lenguajes…

II

Se acumulan en las esquinas hojarasca de soledad,
podredumbre de sueños y resabios de ayer.
Mi esperanza coagula en grietas,
en grietas de pensamientos derruidos;
¿pensamientos?, ¿y yo su artífice?

III

La lluvia cae en los esqueletos,
permite la descomposición.

IV

Un velo rasgado es el horizonte,
está de luto, todo es negrura insondable.
Deshojo una  infecunda escritura
sobre mausoleos de días sepias,
maldigo las horas y sus goteras en habitaciones ruinosas.
La humedad son lamentos,
las ratas roen la memoria y el presente.

V

La lluvia anega tiempo perdido
pero no todo drena al relego.


VI

La lluvia da tregua y aún el silencio es otro lenguaje.
Ponerse en contacto con el recuerdo
es conectarse con la dimensión líquida del ser.










domingo, 18 de diciembre de 2011

VIRGINIA WOOLF



Virginia Woolf, pseudónimo de Virginia Adelina Stephen. Escritora inglesa (1882-1941) nacida el veinticinco de enero en el seno de una familia intelectual.

De Virginia Woolf se puede hablar sobre un estilo que contribuirá a  una nueva literatura más enfocada en el ser humano. Su obra está formada en la conciencia de los personajes, que entre el entorno, pasado y presente, nos acerca mejor a lo que podemos definir como humanos; seres que sienten, imperfectos y no solo actores, sino espectadores de sus vidas. Sus obras más notables son Al faro, La señora Dalloway y Las olas. También escribió los ensayos Un cuarto propio y Tres guineas, así como relatos cortos, publicaciones en periódicos y suplementos y otras obras en las que se pueden citar Los años, Fin de viaje, Orlando, y Flush. Su trabajo está emparentado con el de Joyce, Proust y T.S. Elliot, tanto por la época como por la nueva tendencia literaria.

V.Woolf comenzó a revolucionar el pensamiento intelectual en la Inglaterra de su época. El grupo literario que conformó junto con varios artistas, El grupo de Bloomsbury, buscaba la ruptura de las tendencias pasadas tanto en el arte como en el plano social. Fue una activista femenina que criticó el papel relegado de la mujer, reclamando el derecho a la educación, participación activa en la política y su valoración plena como un ser que puede entregarse a sí misma para su realización personal. Desde pequeña mostró gran empatía por las letras y leía a sus autores griegos predilectos en la lengua helénica. Sin embargo, su vida está marcada por una débil salud física y mental, que a la postre la conduciría al suicido en el río Ouse el veintiocho de marzo de 1941.

Junto con su esposo, Leonard Woolf, fundaron su propia editorial, The Hoggart Press, donde fueron publicados algunos trabajos de ella, T.S. Elliot y Máximo Gorki. Es importante señalar que Elliot no publicó La tierra baldía en The Hoggart Press. Tuvo relación con otros autores de su época como Katherine Mansfield, así como con Sigmun Freud. Otros aspectos de su vida, que tal vez influyeron en su obra, son su familia (Las olas), cierta especulación de su lesbianismo, implícito en mayor o menor grado en su relación con Vitta Sackville-West, y una constante intranquilidad por la calidad de su producción que frecuentemente repercutirá en su estado de ánimo. Cursó con varios periodos de depresión, más o menos largos, que la llevaron a su muerte.

En conclusión, vale referirse a la obra de Virginia Woolf por los elementos que dan al lector una visión más nítida del ser humano. Esta visión, mayoritariamente intrínseca, le da a los protagonistas cierta libertad para independizarse de su creador, y de este modo, obrar como cualquier persona lo haría: a través de dudas, circunstancias y elecciones. Y al final, la buena literatura nos ha mostrado desde muchas otras formas que escribe sobre seres humanos –como lo son sus autores- y no sobre personajes ideales, que podrían ser pensados como primera elección.

viernes, 16 de diciembre de 2011

ADIEU

Dit-moi adieu demain, dit-moi adieu en chemin.













Desde ahí seguirá mi senda,
las palabras fueron muchedumbres
y los jueves, sueño, magia y dolor.
En las baldosas yacen invicibles
tantas páginas dispersas
 y la ambigüacion del ser y la escritura.

sábado, 10 de diciembre de 2011

EL PLACER DE ODIAR


La naturaleza parece realmente (y tanto más cuanto más la observamos) hecha de antipatías y contrarios; sin algo que odiar, perderíamos el veneno del pensamiento y de la acción. La vida se convertiría en una charca, de no sentirse agitada por el choque de intereses contrapuestos y las pasiones desordenadas de los hombres. La veta de nuestro propio destino brilla más (y a veces aun sólo si se torna perceptible) cuando se hace en torno de ella la mayor oscuridad posible; como el arco iris, pinta sus colores en las nubes. ¿Es el orgullo? ¿Es la envidia? ¿Es la fuerza del contraste? ¿Es la debilidad o la malicia? El caso es que hay una secreta afinidad, un ansia del mal en el espíritu humano, el cual siente un perverso pero delicioso placer en la maleficiencia, fuente infalible de goce. El bien puro pronto se vuelve insípido, falto de variedad y de vida. El dolor es un agridulce que jamás harta. El amor, a poco que flaquee, cae en la indiferencia y tórnase desabrido: SÓLO EL ODIO ES INMORTAL.

WILLIAM HAZLITT
(1778-1830)


viernes, 2 de diciembre de 2011

ASÍ SE SUFRE, ASÍ SE GOZA



Vale la pena mencionar, con vistas al futuro, que el poder creador que burbujea tan agradablemente al empezar un nuevo libro, remite al cabo de cierto tiempo, y entonces se avanza con mayor tranquilidad. Surgen dudas. Luego te resignas. La resolución de no ceder, la impresión de que el libro va tomando forma, te empujan a seguir, más que ninguna otra cosa.
Estoy un poco angustiada. ¿Cómo puedo plasmar la idea que tengo en la cabeza?




Virginia Woolf.